La ciudad correntina de Esquina, se encuentra en medio de un delta natural, donde confluyen los ríos Paraná y Corrientes, justamente en frente a su puerto, lo cual deja a su paso hermosas playas. Sin embargo, debido a la bajante del río por la sequía, autoridades alertaron que posiblemente tengan que inhabilitar los balnearios para prevenir accidentes.
La bajante del río Corrientes, en su desembocadura frente a la costa de Esquina es importante y trajo aparejado algunos inconvenientes en los últimos días, por personas que resultaron picadas por rayas que se encuentran en la zona y también hubo heridos por palometas.
El marcado descenso de los cursos de agua genera que los animales queden atrapados en los lugares donde se junta más agua, por el desnivel y no pueden salir de allí a menos que una nueva crecida del río, permita que puedan trasladarse.
Si bien la playa municipal permanecía habilitada hasta ayer, se venía advirtiendo del riesgo que corrían los bañistas al ingresar al agua. Los que buscaron un poco de mayor profundidad fueron mordidos por palometas. Ya había ocurrido, en febrero del año pasado, una situación semejante en la que cinco personas fueron atacadas y debieron cerrar el balneario.
Por otra parte, durante este fin de semana, las autoridades sanitarias de Esquina confirmaron que atendieron a ocho bañistas, los cuales resultaron picados por rayas. El sábado, cuatro bañistas fueron llevados en autos particulares y en los días anteriores habían ingresado cuatro a la guarda médica.