La familia María indicó a NuevaZona que desde hace algunas semanas, la tradicional fábrica de Alimentos Balanceados “Supramar”, finalmente quedó a cargo de “Hijos de José Antonio María”.

En un comunicado se aclara que la firma sigue siendo de la familia de Don José María; en este caso, de Mauricio Antonio y José Maximiliano Jesús. “Uno de los cuales es el tercer José María (el primero fue Don José; el segundo José Antonio María y el tercero es José Maximiliano, todos hijos mayores de cada padre y varones””.

José María fue un visionario de los negocios y fundador de dos molinos harineros. Su marca insignia fue “Supramar”, la fábrica de alimentos balanceados con trascendencia nacional e internacional. Tanto, que en Francia logró el Trofeo Internacional a la mejor imagen de marca durante el 30° Club  Líderes del Comercio.

La empresa llegó a exportar huevo entero a Alemania y expeller y afrechillo a Holanda, entre otros países.

Alimento de calidad

Sobre la situación de la fábrica, Maximiliano María sostuvo: “En cuanto a equipamiento, estamos en condiciones de darle al productor un alimento de calidad que lo ayudará a mejorar su producción”.

“Se llevó a cabo un importante giro en cómo venía la empresa, principalmente, a partir del trabajo de especialistas en la formulación del producto y utilizando materia prima de primera calidad”, señaló.

Inversiones y trabajo genuino

“Hemos realizado inversiones a gran escala, ya que una parte de las máquinas y los camiones estaban bastante deteriorados. Ahora, luego de realizar esas inversiones, hemos podido solucionarlo”.

El proyecto empresario, señaló María, “es convertirse en una empresa que brinde trabajo  a los vialenses, tal como lo hacen empresas de gran envergadura como Stertz y Trocello”.

Además, “buscaremos ayudar a los productores a encontrar una empresa que permita mejorar su producción, y no sólo en la entrega del producto, sino también en cuanto a asesoramiento y acompañamiento en el día a día”.

El empresario explicó que han mantenido distintas reuniones con el personal. “Somos parte de la historia de esta empresa y nos conocemos de toda la vida”, agregó.

“La primera expresión de los trabajadores, al conocer quiénes eran los nuevos únicos dueños, fue de alegría ya que ellos saben quiénes somos. Sin dudas que eso se logra con respeto, responsabilidad, honradez y el sacrificio de estar a la par de los trabajadores”.

También es de destacar el gran esfuerzo de todos ellos en pos de mejorar día a día, “poniendo lo mejor de cada uno para ver su casa, ‘La Supramar’, en óptimas condiciones”.

Empresas amigas

Durante este tiempo, Supramar ha entablado distintas relaciones para potenciar la producción de los alimentos. “Estamos encaminados con empresas amigas, entre ellas, COMA de Iván Cosentino y Andrés Marmiroli. Ellos realizaron el negocio para nosotros, por lo que estamos eternamente agradecidos por su desinteresadas acciones de hermandad liceístas”.

Maximiliano María también agradeció a la firma «Miguel Magnano S. A.», que con Andrés Magnano colaboran en el área de relaciones comerciales y asesoramiento.

Pilares y objetivos

“Tenemos un par de premisas. Honrar a tu padre y a tu madre sobre todas las cosas, ya que nuestros padres nos enseñaron a ser honrados, honestos y trabajadores. Hoy, haberle colocado el nombre de nuestro papá ‘José Antonio María e Hijos’ a la empresa, es nuestro pequeño-gran homenaje.

“Las casualidades existen, ya que la fecha de compra fue el 10 de septiembre, cumple de nuestro padre. Creemos que desde el cielo, él nos guía y ayuda”.

Agradecimientos

“Agradecemos especialmente a nuestros clientes, por ser el pulmón del motor de nuestra empresa. Sin ellos nada sería posible. También, agradecemos a nuestros amigos  que hicieron muchísimos esfuerzos para poder realizar el negocio. La empresa estaba desbastada, sin recursos y con maquinaria deteriorada.  Nuestros amigos, con su ayuda fundamental, hicieron un giro a  empresa. También debemos agradecer a la Doctora Mabel Salcedo por su profesionalidad y enorme labor realizada. Además, a nuestras familias por el apoyo desde el minuto cero”, indicó Maximiliano María.

Pequeña historia

“Somos una pequeña parte de la familia María con mucha humildad, que siempre fue dejada de lado en su decisiones, al negarnos muchas veces como dueños y como legítimos herederos de la sangre y muchas veces estafados por sus propios tíos. Hoy, Dios nos puso en este camino porque maneja todo a la perfección y esperamos hacer las cosas lo mejor posible para que cada trabajador tenga su plato de comida en su mesa. Esa fue la enseñanza más linda que nos dieron nuestros padres. Supramar hoy es una familia”, agregó finalmente Mauricio María.