El gobernador, en el marco de la decisión de su gestión de terminar los privilegios de la política, reasignó vehículos que funcionarios de anteriores gestiones utilizaron para uso personal. “Es un día especial, que quiero que marque un punto de inflexión en la historia de nuestra política”, destacó.
“Este es un día especial, que quiero que marque un punto de inflexión en la historia de nuestra política, de la forma de hacer política en nuestra provincia. No es la única muestra de austeridad que estamos dando, pero es un símbolo importante que tenemos que poner en evidencia”, afirmó el mandatario, desde la Escuela de Oficiales de la Policía, al encabezar el acto de reasignación de autos oficiales. Estuvo acompañado de la vicegobernadora Alicia Aluani y el ministro de Seguridad y Justicia Néstor Roncaglia.
“Desde antes de asumir, fuimos bien claros con respecto a los privilegios de la política: los entrerrianos la están pasando demasiado mal, no es posible que haya funcionarios que disfruten de beneficios que no tienen nada que ver con el sufrimiento de la gente. Dijimos que íbamos a terminar con los privilegios y lo estamos haciendo”, enfatizó.
“También quiero contarles que hay vehículos que aún ni siquiera sabemos dónde están. El desorden es tan grande que en muchas áreas figuran autos oficiales pero éstos, llamativamente, no aparecen. Como siempre, la oscuridad favorece la viveza de algunos”, añadió.
Párrafo seguido indicó que “todos los autos que fueron informados y están en condiciones, hoy los volvemos a poner al servicio de la comunidad y van a ser redireccionados al Ministerio de Seguridad y Justicia, porque los vecinos necesitan que pongamos el foco en cuidarlos más y mejor”. Y agregó que “otros vehículos van a ser destinados a los municipios y a las comunas que también lo necesitan para mejorar sus gestiones”.
Cabe destacar que es la primera entrega de vehículos oficiales que han sido reasignados, en esta oportunidad, a la Policía de Entre Ríos. Se trata de los primeros 50 autos de un total de 160 que serán puestos al servicio de la comunidad. Las próximas entregas estarán destinadas, además de la Policía, a juntas de gobierno y comunas que los necesiten. Será a medida que se vayan recuperando y reparando.
Por último, sostuvo: “Muchos funcionarios de las últimas gestiones, evidentemente, no entendieron que como servidores públicos tenemos la responsabilidad de cuidar los bienes de la gente como si fueran propios o aún más que eso”.
