Piossasco es una localidad de Italia, ubicada en la provincia de Turín, que posee 17.600 habitantes.
Allí vive –de manera definitiva desde hace dos años- la vialense Norma Trocello, casada con el italiano Paolo Trocello.
Su pueblo, hasta el momento, sólo registra dos casos de coronavirus. Pero algo muy distinto ocurre a nivel país. Recordemos que Italia ha superado este martes los 2.500 muertos por el coronavirus.
Como suele ocurrir cuando un problema comienza a manifestarse, al principio la mayoría de la gente suele minimizarlo y no toma real dimensión de la situación. Algo similar sucedió en Italia hace apenas unas semanas.
“Al principio, la mayoría no llegamos a dimensionar lo que podía causar este virus. Pero cuando comenzamos a ver lo que estaba ocurriendo, primero en China y luego en Italia, nos dimos cuenta que no era algo para minimizar”, explicó Norma a NuevaZona.
“Hoy la situación es muy delicada; prácticamente grave. Si bien en mi pueblo no se siente tanto el problema, en otras regiones es impresionante la cantidad de casos y muertes”.
“Las pérdidas económicas son impresionantes y lo seguirán siendo. Hay muchísimos negocios y empresas cerradas. Y en la calle no anda prácticamente nadie”. Así describe la situación actual que vive hoy Italia. “Y eso que aún se espera un pico del virus para la semana próxima. Los contagios siguen, pese a que la mayor parte de la gente está en su casa”.
Sin embargo, el gobierno decretó que aquellos que tienen créditos no tendrán que pagarlo hasta que esto pase y ha tomado otras medidas para atenuar el caos económico que vive el país en este momento.
Controles policiales
“Para salir, la policía controla todo. Tenemos que salir con un certificado donde consta todos los datos personales y adónde vas. Se controla muchísimo. Sólo se puede salir para ir al supermercado, a la farmacia, o alguna urgencia. Para nada más. Al Doctor no se puede ir, sino que hay que llamar y ellos vienen a tu domicilio para comprobar el problema”, agrega.
Afectos en Argentina
“Mi corazoncito sigue en Argentina. Y yo tengo miedo por mi familia y mis seres queridos. Yo ayer le decía a mi marido: ‘¿Será posible que no tomen dimensión en Argentina de este gravísimo problema?’ Con todo lo que está pasando acá, los argentinos deberían darse cuenta que esto no es nada sencillo. Lo más grave es que yo advierto que la gente no toma conciencia de lo que puede hacer este virus”.
“Lamentablemente, creo que Argentina no está preparada para recibir el pico del virus, porque esta situación ha colapsado todo sistema de salud en el mundo. Y si un día llegan 300 personas al Hospital San Martín de Paraná con el virus, o 30 a Hospital de Viale, no creo que ninguno de esos hospitales esté preparado para atender semejante demanda. Hay que ser consciente que el sistema sanitario colapsa. Por eso la importancia de la prevención hoy mismo”.