Rodrigo Leiva, Martín Olmos, Marcelo Paye, Camilo Santos, Marcelo Santos y Oscar Domínguez, están imputados por el crimen de Julio Trossero, ocurrido el 12 de agosto de 2017, alrededor de las 21.00, en la vivienda familiar, ubicada en la zona rural sobre la ruta provincial Nº 32, a metros del acceso a Seguí.
El jueves 8 de marzo el juez de Garantías Nº3, Ricardo Bonazzola, resolvió prorrogar el encarcelamiento preventivo de los seis imputados hasta que se realice la audiencia de remisión de la causa a juicio. Fuentes judiciales consultadas deslizaron que aquella audiencia se realizará esta semana. Bonazzola hizo lugar a los acuerdos alcanzados entre la fiscal Paola Farino y las defensas de los imputados, que en el caso de Leiva y Payé, están en manos de los defensores públicos, Sebastián Lescano y Humberto Franchi, respectivamente; y en el de Marcelo Santos y su padre, Camilo Santos, en la de los defensores particulares Joaquín Pérez y Javier Aiani. En relación a Olmos, cuyo representante es José Barbagelata, el imputado se encuentra beneficiado con la libertad ambularía.
Fuentes judiciales consultadas deslizaron que Olmos podría llegar a quedar al margen de la acusación. Los seis imputados enfrentan cargos por el grave delito de Homicidio en ocasión de robo, por el brutal ataque ocurrido el 12 de agosto de 2017, en la vivienda de la familia de la víctima, ubicada en la zona rural sobre la ruta provincial Nº 32, a metros del acceso a Seguí.
En una audiencia anterior, celebrada el 10 de febrero, Farino realizó un detallado relato de una parte de la prueba que se colectó en la Investigación Penal Preparatoria (IPP), de la que se destacó el trabajo que se realizó sobre los celulares de los imputados, de cuyos entrecruzamientos surgirían fuertes indicios que acreditarían el vínculo entre ellos y la existencia de un “plan común previamente ideado por los imputados y a la división de tareas acordadas como producto del mismo”.