Fue todo muy rápido. Demasiado rápido. Sonó el teléfono y del otro lado, una voz que daba cuenta de lo sucedido con su padre.
Viajaron de inmediato al Hospital San Martín, de Paraná, donde había sido trasladado de urgencia. En la sala, una Médica les consultó algo que sonó fuerte, pero que confirma que la vida sigue más allá de la muerte. La profesional les preguntó si querían donar los órganos.
«Junto a mis hermanos nos miramos y dijimos que sí», contó su hija a NuevaZona. «Fue raro, pero no lo dudamos y dimos nuestro consentimiento», relató.
Esa actitud -esa firme actitud de los familiares en un momento tan difícil para cualquier ser humano- cambió el rumbo para otras personas. Y permitió mejorar la calidad de vida de otros pacientes.
Esta historia, ocurrida hace algunas semanas, fue contada a nuestro medio por los propios protagonistas. Como la ley prohíbe difundir las identidades, nos vemos en la obligación de no dar a conocer sus nombres.

Entre Ríos, con índice récord
Entre Ríos se convirtió en 2015 en la jurisdicción con mayor cantidad de operativos de ablación en el país, en relación a su población.
Cada donante permite mejorar la calidad de vida de muchas otras personas. De acuerdo con el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablaciones e Implantes (Incucai), Entre Ríos tiene un índice de 22,7 donantes por millón de habitantes (DPMH), por encima de la media nacional, de 13,5 DPMH. Detrás quedaron Capital Federal con 20,6; Santa Fe con 20 y Córdoba, con 19,6 DPMH.
Como contrapartida, entre los más bajos índices de donación aparecen Jujuy con 1,4; Chaco con 1,7 y Santiago del Estero, con 3,2 DPMH

Un gesto para destacar
En el caso que aquí se cuenta, la generosidad de los familiares que autorizaron la donación permitió que dos personas puedan recuperar la visión tras someterse a un trasplante de córneas.
El trasplante de córneas es la posibilidad que tienen muchas personas de recuperar la visión y mejorar su calidad de vida, y solo es posible gracias a la donación.
Este gesto voluntario, en un momento tan duro y difícil, confirma que la generosidad brinda -siempre- una luz de esperanza para otras personas.