Los merenderos de la ciudad, que llevan por nombres «Micaela García» y «Caritas felices», realizaron una celebración especial.

Es que no fue un día más para muchos niños y adolescentes del barrio. Sobre todo, para Mili y Cati, quienes cumplieron 15 años, «con todo lo eso conlleva para una niña que sueña con compartir con sus amigos y familia, con el vals y su vestido». Quien lo cuenta es Romina Sanabria, una de las organizadoras de la fiesta.

«No podíamos permitir que esos sueños sean solo eso y por eso nos pusimos en acción, y junto a todos los compañeros empezamos a comentarles a nuestros amigos, conocidos y familiares para que nos den una mano. La respuesta fue inmediata, así que se puso en marcha la Fiesta de nuestras queridas quinceañeras», explicó Romy.

Así, hubo organización y cada uno aportó un granito de arena, «organizando la comida, el postre, las tortas, las fotos, el cotillón. No faltó nada; fue un festejo sencillo pero con mucho amor para que la gurisada pasara un día inolvidable».

Visión justicialista

«Desde nuestra visión justicialista, nunca es una opción mirar para otro lado. Por eso, desde el primer momento entendimos que al igual que el acceso a la educación, la salud , el trabajo para los sectores más postergados, la felicidad también es un derecho. Arturo Jauretche decía: ‘Nada grande se puede hacer con la tristeza. Nos quieren tristes para que nos sintamos vencidos y los pueblos deprimidos no vencen… Por eso, venimos a combatir alegremente. Seguros de nuestro destino y sabiéndonos vencedores, a corto o a largo plazo’.

«Queremos agradecerles infinitamente a todos los que colaboraron para que sea una jornada de inmensa felicidad para los Merenderos ‘Micaela García’  y ‘Caritas Felices’. Mili y Cati cumplieron uno de sus sueños», contó Romina.

Fotos: Carolina Plassy