Días pasados, y luego de retirar dinero, una mujer dejó olvidada su tarjeta en el cajero del Banco de Entre Ríos.
Afortunadamente, el plástico fue encontrado por dos honestas personas que habían concurrido esa misma tarde al lugar: Marcela Grinóvero y Coco David.
De inmediato, ambos vecinos realizaron llamados y consultas para poder dar con la titular de la tarjeta, a quien posteriormente ubicaron.
En épocas donde las malas noticias concentran los grandes titulares periodísticos, gestos tan nobles como el de Marcela y Coco merecer ser destacados.