Eran cientos, miles de familias que buscaban (necesitaban) una sola cosa: paz.
A fines de la década de 1970 y principios de los años ’80, numerosas familias escaparon de Vietnam, Laos y Camboya. Huían de la guerra, la pobreza y el abandono total. Abandono de sus gobiernos, de Estados Unidos y del mundo entero.
“Hacia mediados de los años 70 el sudeste asiático se encontraba al final de la segunda Guerra de Indochina o Guerra de Vietnam, conflicto que surge de la intervención armada de los Estados Unidos en los países del sudeste asiático con el objetivo estratégico de establecer Estados aliados frente al avance de los Estados comunistas”, explicó hace unos años la Dirección Nacional de Población a cargo del Ministerio del Interior.
El éxodo de población en las antiguas colonias francesas de Indochina fue masivo, estimando en más de 3 millones de emigrantes que dejaron sus hogares por miedo a represalias o persecución.
Semejante movimiento de personas que huían a todo el mundo, obligó a las Naciones Unidas a llamar a la Conferencia Internacional en Ginebra en procura de resolver la situación de los refugiados.
Así, 65 gobiernos participaron de la cumbre de 1979: firmaron compromisos con la promesa de recibir a las comunidades desplazadas del sudeste asiático.
En Argentina, la dictadura cívico-militar que gobernaba por entonces, decidió recibir a la población desplazada de sus raíces. El gobierno se comprometía a albergar aquí a mil familias. Sin embargo, de las mil familias que la Junta Militar ofreció recibir, desembarcaron sólo 293, según registros oficiales del Programa para Refugiados Indochinos en la República Argentina del ACNUR.
266 familias provenían de Laos, 21 de Camboya y 6 de Vietnam. Los expedientes de los archivos de la Comisión Nacional de Refugiados estima que -en total- llegaron a nuestro país 1.270 personas provenientes de la región Indochina.
Hace un tiempo, NuevaZona accedió a un álbum de fotos de gran valor histórico. La recopilación de imágenes se titula: “Refacciones del Hogar de Viale para la llegada de familias vietnamitas”.
En la serie de fotografías se observan importantes ampliaciones de la cocina, construcción de varios pabellones y nuevos baños del Hogar “Roque Sáenz Peña”.
Sin embargo, las pocas personas vietnamitas que arribaron a la Argentina, fueron ubicadas en otras provincias.
“Esas reformas en el Hogar se hicieron para la llegada de familias surasiáticas, pero finalmente nunca arribaron a Viale”. Quien lo contó tiempo atrás a NuevaZona fue el recordado Chacho Sanabria, quien se desempeñó durante años en el Hogar de Jóvenes.
Sólo llegó a nuestra localidad una familia procedente de Laos (considerado el país más bombardeado del mundo), que fue ubicada en una vivienda cedida por el gobierno municipal de entonces. No se instalaron en el Hogar de Jóvenes, sino en una casa brindada por la comuna local.
Por ello, las refacciones y ampliaciones realizadas aquellos años en el Hogar quedaron finalmente como mejoras edilicias para la propia institución.


