El constructor Rodrigo Dalinger y sus muchachos quedaron asombrados cuando la encontraron. Era una botella de vidrio que contenía algo en su interior, pero que a raíz del paso de los años (décadas, en realidad), no podía divisarse a simple vista de qué se trataba.

La botella estaba en uno de viejos cielorrasos de la antigua casona Tropini, ubicada en calle Urquiza (a metros de la histórica ferretería de la tradicional firma vialense).

Cuando finalmente la rompieron, advirtieron que en su interior había un cartón escrito con  una delicada caligrafía, realizada con pluma y tinta. Y tenía fecha: 24 de noviembre de 1932.

Según supo NuevaZona, la amarronada papeleta detallaba quiénes habían sido los albañiles que llevaron adelante, 93 años atrás, aquella construcción.

Según consta en el rudimentario documento, el constructor había sido un hombre de apellido Cargnel y los oficiales: Salamone, Vergara y Pérez.

La nota llevaba la firma de Atilio Tropini.

La familia Pérez, actuales dueños de la propiedad, decidieron acertadamente conservar el viejo cartón que fue hallado en el lugar, junto con otros elementos de gran valor histórico para nuestra pueblo.

(NuevaZona)