Una mujer, de 83 años, fue víctima de un brutal asalto en la zona rural de María Grande II, en el departamento Paraná. Los delincuentes se aprovecharon de la bondad de la mujer y tras engañarla por un falso pedido de un inflador y vasos de agua, la maniataron y le robaron sus ahorros.
Según precisaron vecinos, varias personas en tres motos se acercaron hasta la casa con el pretexto de pedirle agua y algún elemento con el que puedan inflar las cubiertas de sus motos que estaban bajas y así poder continuar con su camino. La mujer buscó entre sus pertenencias un inflador para poder ayudarlos y luego de unos minutos estas personas se fueron del lugar, pero antes le preguntaron por el hijo de la dueña de casa. La señora sin desconfiar les comentó que estaba trabajando a varios kilómetros del lugar y que volvería más tarde. Estas personas le agradecieron la información y continuaron con su recorrido.
Minutos más tarde, los delincuentes regresaron a la casa de la mujer, pero esta vez sin mediar palabras la ingresaron y metieron a la fuerza en la casa. Una vez dentro, comenzaron a exigirle que les entregue el dinero que tenía y todas las pertenencias de valor.
La anciana anonadada les pedía que no le hagan daño y muy aterrorizada le hizo entrega de una cajita donde guardaba todos sus ahorros: unos 500.000 pesos. Los delincuentes no satisfechos con lo que les entregó la mujer, la golpearon brutalmente y le ataron sus manos con precintos a la puerta.
Rodríguez pasó al menos cinco horas atada con precintos hasta que llegó su hijo a la vivienda luego de una jornada de trabajo. Debido a que estuvo un gran lapso de tiempo atada, sufrió severas heridas al intentar zafarse de los precintos. Se cortó en uno de sus brazos y debieron realizarle siete puntos de sutura.
El hijo tras llegar y ver tremenda situación, rápidamente ayudó a su madre y la llevó al hospital de la localidad de María Grande.
Tras el tremendo hecho de violencia, realizaron la denuncia en la Comisaría de la localidad de María Grande.
El once