En marzo de 2019, comenzaron las obras de recambio de cubierta de techos y la adecuación del sistema eléctrico de la Escuela Primaria Nina Nº 203 “Guaraní”, pero según confirmó el presidente de la Cooperadora de la institución, Ariel Rothar, las mismas aún no han sido terminadas. El dirigente, en diálogo con los medios del “Centro Periodístico de Entre Ríos”, expresó: “Necesitamos con urgencia que se finalicen los trabajos antes del ciclo escolar 2021. Era una obra que debía hacerse en 120 días y hace 2 años que estamos peleando para que se termine. No sabemos ya a quién más reclamar. Era retirar las tejas y poner chapas, porque por el mismo peso de las primeras, estaban cediendo los tirantes y era un riesgo para los chicos. Por otra parte, la instalación eléctrica, que todavía resta finalizarla, era un peligro como estaba, además del riesgo de tomar contacto con el agua, por las filtraciones. Primero pusieron la excusa de que como estaban los chicos dentro de la institución, no podían avanzar con las obras, pero ya sin clases, tampoco lo hicieron. Es un misterio lo que va a pasar el año próximo, porque nadie nos responde. Hoy, así, no están dadas las condiciones para que vuelvan los chicos a clases. Desde la Cooperadora hicimos 3 aulas extras, que las levantamos de 0, trabajando los fines de semana durante casi dos años y es una satisfacción, porque hay más lugar, pero necesitamos igualmente de los demás espacios”.

Daños

Rothar comentó que días pasados, los integrantes de la Cooperadora realizaron reparaciones, por los graves hechos de vandalismo que sufrieron en los primeros días de diciembre. “No se sabe quiénes fueron. Nos generó mucha impotencia, porque además de pintar las paredes, forzaron una puerta de aluminio, que también representó un gasto, del que se tuvo que hacer cargo la Cooperadora. Cortaron, para ingresar, el tejido que hacía poco habíamos arreglado… Hubo otro episodio, en el que rompieron botellas y las dejaron tiradas y entraron con vehículos, hicieron escarbadas, rompieron el patio… Es una situación que no tiene explicación. Cuando hicimos las reparaciones, además podamos unos árboles para despejar la visión y si los vecinos ven algo, puedan avisar. La única cámara de seguridad que hay en esa zona, está muy lejos, en el Club Unión”

El Observador